Fotografia:antonioeviesart |
No es una promesa que se romperá en un instante,
no es un soplo de brisa que se desvanece en el frio...
no es una algarabía de pájaros viajeros
es una palabra que se hace eco en el silencio.
Acá esta mi piel,
extensa como horizonte, como mar...
desnuda de besos y caricias, con el calor de la espera, con la sed entera
de las horas, acá esta mi piel...no es una cárcel con cadenas,
no es una jaula con brocados de oropel...es un instante en la espera,
es una alcoba para alojar tus besos...
Ven a mi piel, voy a la tuya...intercambiemos mundos
mientras miramos la luz de un nuevo día,
no te prometo nada, es imposible,
lo pecadores solo pecan nada mas...
Te invito a tocar el cordaje de todas la guitarras azules,
a encerrar las nubes en los labios,
te invito a desterrar el miedo, mi piel te espera entre tiempos nuevos,
es la piel que de otras pieles nada tiene.
Ser dos hojas en el vendaval de las horas,
ser dos velas navegando entre acaloradas aguas de un rio de fragor y fuego,
ser dos semillas renacidas en otoño, dos nuevas llamas encendidas entre
un encuentro esperado.
Ven a mi piel, una estancia para tomar el rocío de la llovizna,
una espera sin preguntas...un camino que se olvido de ayeres,
acá no hay espinas que delaten penas, acá solo esta la sombra que te espera,
una capa de luz para tu nombre.
Quieres venir a mi piel?...
no te esperan oraciones, ni promesas...
no es una mansión de mil pesares,
ven que urgen cantos de susurros y nuevos caminos que por explorar van quedando.
Quieres venir a mi piel?...
las manos desnudas ya te están esperando.
Antonio Evies / Octubre 2024. Serie "Poemas a lontananza"
Obra: Pájaros de montaña
Oleo sobre tela
Abril 2024